lunes, 30 de junio de 2008

YA HEMOS CASADO A OTRO

Este sábado nos fuimos de boda. El día era prometedor, de hecho cuando me junto con mis amigos de toda la vida la cosa suele prometer. Y no fue mal del todo.

La celebración eclesiástica estuvo en un gran nivel. Pese a lo poco que me gustan sus lugares hay que reconocer unas cuantas cosas: el lugar arquitectónicamente era muy bonito, el cura pese a ser cura se comportó, estuvo simpático y con palabras de complicidad (impresionante su explicación del parchís)y las dos mujeres que cantaban acompañando al piano, buff, estuvo muy bonito y emocionante.

De camino al restaurante nos encontramos con uno de los cracks de la noche, el señor conductor del autocar. Alumno aventajado de Justo Molinero, era capaz de conducir y dedicar canciones a la vez al respetable, hacer comentarios anticatalanistas y machistas. Todo un figura. El hombre le costó pero entendió que el restaurante estaba en Tiana y no en Triana...

Al llegar al restaurante nos esperaba una banda de música que tocaba música en directo. Entre el calor y el traquetreo del autocar la sed era una constante en todos nosotros así que asaltamos al primer camarero que traía la cerveza. El aperitivo viene, tras unos primeros platos de esas cosas raras que yo no pruebo por si no me gustan, llegamos a la chistorra con patatas chips, fideuà, etc.

Aquí llegamos a uno de los momentos claves de la tarde-noche. Persigo a mi amigo Guillermo que se distanciaba del resto y pensé: "este va al baño fijo", voy a seguirle. Total que cuando me di cuenta estaba dentro de una especie de bodega rodeado de diferentes vinos y con un hombre al fondo cortando jamón y unos platos llenos de jamón. ¡¡¡Había encontrado el paraíso!!!! En ese momento me debatía en la disyuntiva. Aviso al resto o como jamón con vino. Miré a Guillermo y le dije: "Willy, traéte un par de platitos". A esto que íbamos a salir a avisar cuando ya entraron todos... que rico estaba el jamón.

Saliendo para fuera llegó el momento de las fotos. El hermano de Gonzalo Miró que hacía de fotógrafo y que luego resultó ser italiano (pero de los raros, no conocía ni a Enzo Maresca) y tenía nombre de niña: Andrea. Fotito y para dentro a comer.

Llegamos a la mesa. Mesa 10. Nos hacemos los reyes del lugar, entonando diferentes cánticos, mesa 10 oe, mesa 10 oe. La comida buenísima. De primero un espléndido bogavante, de segundo solomillo de ternera, poco hecho para mi gusto pero muy rico y tierno, la salsa muy buena. Buen vino blanco, buen vino tinto. Luchamos por conseguir una botella extra y la conseguimos. Un sorbete margarita y un postre de chocolate. Todo buenísimo. Entre medias, alguien que llama al 11888 intentando conseguir el teléfono de unes putes en Madrid...

Llegó la hora del regalo, una bolsa de basura con la cara de Julián Muñoz e Isabel Pantoja, todo repleto del dinero en billetes de cinco euros y papeles de periódico. Creo que estuvo divertido y no llegó a poder ser calificado como putada, fue muy gracioso.

Y a bailar, a la barra libre. Aunque ya entré en mi dinámica habitual de no pasarme porque estaba en ese momento en el que una retirada a tiempo se convierte en victoria. Javi me pide un cubatilla de whisky y con él tiro un buen rato para pasarme a los zumos de naranja y al agua. Alguno que otro no sigue mi táctica y apuran la barra libre hasta el final. Cada vez que miraba un cubata nuevo en la mano. Bailamos mucho y bien, la fiesta se alargó. Sonaron canciones míticas. Mi tobillo y el cansancio dijeron basta. Mientras Montse dormía y Guillermo hablaba con toda la familia de la novia y con cualquiera que se le pusiera por medio nos pegamos una buena charla en la mesa. El novio y su madre salen con bolsas. Irán a pagar. Última canción y de vuelta al autocar. A la entrada, el conductor figura le da una bolsa a cada uno de los vomitadores en potencia. El tío tuvo bueno ojo, porque acertó con los peligrosos.

Viaje en autocar, algún que otro cántico y de vuelta al Mercado. Guillermo sigue hablando con unos abuelos que tenían toda la pinta de estar esperando el autocar para hacer la excursión esa que te regalan cinco letras de aceite. Andandito para casa, ducha de agua fría y a intentar dormir. Son las seis de la mañana, ya ha amanecido y hace mucha calor...

3 comentarios:

Javi G. Rigol dijo...

mi mas sincera felicitación a los recien casados pero... ya se sabe la han cagado como casi todos, jejeje un saludo

Taratan dijo...

Como dicen por ahi......no le pegues, no le mates, casalo.

Raul dijo...

Gran crónica la relatada....

Como veo que que lo has pasado bien, no te diré que te pases por la Cerdanya......

Me guardaré un kiriki para la vuelta...jejeje