Como cada lunes, hoy he llegado a trabajar. Bueno, como cada lunes no, hoy más triste que ningún otro lunes. Al llegar al despacho, como el pasado invierno y desde que dejaste de venir a trabajar, he vuelto a notar la sensación de frío. Cuando tú estabas, eso no pasaba nunca. No había día que se te olvidara encenderme la calefacción para que a mi llegada notara el calor. Y en verano el aire frío, claro está.
El mismo calor que tu persona desprendía. Recuerdo el primer día que me hablaron de ti, yo tenía un horario raro, tenía que entrar a las 15 horas porque salía una hora antes, pero me dijeron que no me preocupara, que allí estarías tú para abrirme la puerta. Lo que no imaginaba es que estarías todos los miércoles a las 15 horas en punto, clavada, esperando a que yo llegara. Ni tampoco olvidaré el día que me diste tu número de teléfono por si algún día llegaba y no estabas. Creo que no pasó nunca.
Recuerdo cuando me contabas tus andanzas con el abuelo, tu lucha diaria con tus hijos, que si el mayor esto que si el pequeño lo otro. Tus anécdotas con los viajes del rugby, tus quehaceres diarios a la hora de lavar esa ropa con tanto barro acumulado. Aunque nunca te lo dije te admiraba, admiraba tu entrega, tu trabajo incansable, eras un ejemplo de mujer que lucha para salir adelante.
Creo que nadie sabe que eres la única persona que me hizo llorar el día de mi boda. Tan puntual y tan cumplida como siempre, me llamaste, a las nueve en punto tal y como te dije porque luego no estaría para atender el teléfono y me diste la enhorabuena. No sabes qué sensación me produjo que una persona como tú, que ya estabas inmersa en esa tremenda lucha que te ha terminado venciendo, me dijera que fuera feliz, que me lo merecía. Evidentemente se me saltaron las lágrimas, de emoción, de alegría y de tristeza a la vez temiendo que llegaría el día de ayer.
Un SMS que me hizo despertar de mi siesta de los domingos. Un SMS que no por esperado dejó de ser triste y doloroso, decía lo que todos temíamos y que finalmente ha sucedido.
Un día leí que las personas están vivas mientras se les recuerda, por eso, algunas permanece inmortales y eternas. Hoy te he querido recordar. Un beso muy grande amiga Tomasa.
lunes, 23 de noviembre de 2009
jueves, 5 de noviembre de 2009
UN MATIZ QUE PUEDE CAMBIAR EL SENTIDO
Leo este artículo que me envía mi buen amigo Juanma y a raíz de unos comentarios, reflexiono...
¿Por qué no se escribió este artículo cuando en vez de Diawarra había que poner Diarra y en vez de CR9 había que poner CR espo?
Qué casualidad que el nombre de los cuatros implicados sean tan parecidos pero que la visión del periodista cambie tan radicalmente cuando el madridista no es el agresor sino el agredido.
Y encima cargarse a Cristiano Ronaldo le sale gratis a Diawara
05/11/09 - 10:35.
Alarma en el Real Madrid. El edema óseo de Cristiano Ronaldo no mejora y el diagnóstico es preocupante: tendrá que estar al menos otro mes de baja. Pero eso no es lo peor. Si tuviera que volver a operarse del tobillo que ya fue intervenido en el verano de 2008 no podría volver hasta dentro de tres meses. Por eso, la preocupación en el club durante todo el día de ayer estaba más que justificada. El Madrid ha pagado un alto precio este último mes por la ausencia en el equipo del futbolista más determinante del mundo. Si la baja se prolonga otras cuatro semanas, Pellegrini tiene motivos más que de sobra para estar intranquilo. Dramático sería no poder contar con CR9 en el momento clave de la temporada, cuando empiecen a estar en juego los títulos a los que quiere optar el Real Madrid.
La lesión de Cristiano es, sin duda, la peor de las noticias que podría recibir el madridismo a estas alturas. Si algo ha quedado demostrado en este inicio de temporada es la Ronaldodependencia del equipo. Los nueve goles en siete partidos del portugués resultaron fundamentales para el buen arranque del Real Madrid. Luego, se lesionó y llegó la primera crisis de la temporada. Los números no engañan: sin CR9, dos victorias, dos empates y tres derrotas.
Cristiano ya está en Amsterdam, dispuesto a ponerse en manos del mejor especialista, el doctor Van Dijk. Es de su absoluta confianza y el que mejor puede diagnosticar cuál es la solución para sus males en el tobillo derecho. Mientras tanto, Diawara, defensa del Marsella, sigue jugando pese a la brutal entrada que provocó la lesión de Cristiano. La justicia deportiva debe proteger el espectáculo y castigar a quienes como Diawara se lo cargan.
¿Por qué no se escribió este artículo cuando en vez de Diawarra había que poner Diarra y en vez de CR9 había que poner CR espo?
Qué casualidad que el nombre de los cuatros implicados sean tan parecidos pero que la visión del periodista cambie tan radicalmente cuando el madridista no es el agresor sino el agredido.
Y encima cargarse a Cristiano Ronaldo le sale gratis a Diawara
05/11/09 - 10:35.
Alarma en el Real Madrid. El edema óseo de Cristiano Ronaldo no mejora y el diagnóstico es preocupante: tendrá que estar al menos otro mes de baja. Pero eso no es lo peor. Si tuviera que volver a operarse del tobillo que ya fue intervenido en el verano de 2008 no podría volver hasta dentro de tres meses. Por eso, la preocupación en el club durante todo el día de ayer estaba más que justificada. El Madrid ha pagado un alto precio este último mes por la ausencia en el equipo del futbolista más determinante del mundo. Si la baja se prolonga otras cuatro semanas, Pellegrini tiene motivos más que de sobra para estar intranquilo. Dramático sería no poder contar con CR9 en el momento clave de la temporada, cuando empiecen a estar en juego los títulos a los que quiere optar el Real Madrid.
La lesión de Cristiano es, sin duda, la peor de las noticias que podría recibir el madridismo a estas alturas. Si algo ha quedado demostrado en este inicio de temporada es la Ronaldodependencia del equipo. Los nueve goles en siete partidos del portugués resultaron fundamentales para el buen arranque del Real Madrid. Luego, se lesionó y llegó la primera crisis de la temporada. Los números no engañan: sin CR9, dos victorias, dos empates y tres derrotas.
Cristiano ya está en Amsterdam, dispuesto a ponerse en manos del mejor especialista, el doctor Van Dijk. Es de su absoluta confianza y el que mejor puede diagnosticar cuál es la solución para sus males en el tobillo derecho. Mientras tanto, Diawara, defensa del Marsella, sigue jugando pese a la brutal entrada que provocó la lesión de Cristiano. La justicia deportiva debe proteger el espectáculo y castigar a quienes como Diawara se lo cargan.
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